Cine, cine, cine, cine
más cine por favor,
que toda la vida es cine,
y los sueños... cine son
(Esto cantaba Aute)
Esta maquinita de cine era de nuestro padre y durante muchos años fue una fuente de diversión para nosotras y para nuestros amigos. Muchas tardes de domingo improvisábamos una sala de cine en el pasillo y donde la pantalla era la puerta blanca del "armario del pasillo".
Decidimos hacerle esta caja con cartones reciclados ya que la de zapatos en la que estaba guardada se rompió por el uso. Las fotografía que decoran la misma son de las portadas y contraportadas de una enciclopedia llamada "Las Estrellas" y compramos por fascículos.
Todavía tiene un encanto especial esta antigua máquina de cine incluso para las nuevas generaciones de la familia porque donde este la máquina de cine del abuelo que se quiten los ordenadores y las maquinetas modernas.